Cómo enseñar a dormir a tu bebé
Enseñar a dormir a tu bebé es una de las tareas más complejas en el primer mes del bebé. Si tu bebé presenta problemas de sueño, altera tu vida en pareja, lo cual lleva a provocar más cansancio y ansiedad… Por tanto, es muy importante enseñar a tu bebé a dormir mejor.
A través de pequeños pasos puedes poco a poco enseñar a tu bebé a dormir. Lo más importante que debes saber es que no debes imponer un horario al bebé, sino que tú eres quien debe acostumbrarse al horario de él. Los bebés sólo duermen cuando están cansados, tu bebé no va a dormir porque tú lo pusiste en su cuna y esperas a que se duerma, tienes que intentar crear una rutina antes de ponerlo a dormir, por lo que tras repetidas veces, asocie al sueño. Por ejemplo poner una música relajante, o contarle un cuento.
Otro tema de ayuda es que equilibres los horarios de siesta, debes procurar que la siesta no sea tan extensa ya que más tarde va a ser muy difícil que concilie el sueño. Si el periodo de sueño supera las cuatro horas, despiértalo suavemente. Los recién nacidos tienen estómagos muy pequeños, su digestión es rápida y su dieta es en base de líquido, por lo que cada 3 o 4 horas necesitará amamantar y se despertará con hambre para eso. En algunos casos pueden dormir hasta cinco horas, que es toda una noche para el bebé. Tienes que intentar que la última cena no sea más tarde de las diez de la noche, ya que cuanto más tarde sea, más probable es que tenga cólicos, independientemente de las veces que te despiertes a amamantarlo durante la noche.
Paso a paso
Pcoco a poco enséñale la diferencia entre día y noche, puede parecer difícil que tu bebé aprenda esto tan pequeño, pero con alguna ayuda se puede hacer más fácil. Intenta jugar con él durante el día, que haya movimiento y ruido en la casa; durante la noche que haya calma y silencio.
A partir de la cuarta semana, intenta que tu bebé se quede sólo un breve periodo de tiempo antes de dormir, haz la prueba y deja que concilie el sueño sin tu ayuda, al principio puede que haga ruidos e incluso llore, pero déjalo, porque es normal. Si el llanto continúa, acompáñale. Por último, los bebés también se cansan, no sólo los niños con más edad, por tanto intenta mantenerlo activo cantándole, hablándole, jugando con él, paseándolo, y verás como se quedará profundamente dormido en menos tiempo.